Las Máscaras de Santa Ana Teloxtoc
En el año de 1980 en una caverna ubicada en esta población, fueron encontradas 12 máscaras de esta naturaleza, se piensa que la humedad y la temperatura hicieron posible la conservación tanto de las mascaras como de los escudos o Chimalli, elaborados en madera ya que la cueva aunque se encuentra cerca de una cantera de ónix resulta inaccesible para el hombre y la fauna del lugar. En el Museo del Valle de Tehuacán se encuentran en exhibición estas magníficas piezas que son el legado de la habilidad artesanal de las culturas prehispánicas.
La pregunta es ¿Qué hacían estas misteriosas máscaras en esa cueva?
Se piensa que fueron colocadas a modo de adoración como parte de una ofrenda colectiva, no obstante en Teloxtoc no se conserva una tradición en relación con la caverna ni tampoco se puede decir que fuera visitada con regularidad, tampoco que tuviera un uso como templo.
La ofrenda como tal tampoco es moderna, se piensa que puede venir del post-clásico o principios de la Colonia, cuando se prohibieron las costumbres de los indios, sin embargo estas máscaras son diferentes a otras encontradas en México, ya que en las de Teloxtoc destaca la fantástica elaboración, el diseño, la ornamentación, que nos hace preguntarnos sobre quién o quiénes utilizaban tales máscaras y para qué fines.
Si diéramos por hecho que todo ese material fue depositado allí después de la Conquista, tendríamos a favor las frecuentes prohibiciones de que fueron objeto los bailes, usos y costumbres de los indígenas por los frailes, lo que obligaría a ocultar todo ese material en un lugar sagrado, lejos de la mirada de personas ajenas o de sus perseguidores.
El extraño silencio y desconocimiento que existe acerca del hallazgo de las máscaras también puede interpretarse como la pérdida de tradiciones y costumbres antiguas. La única noticia que se obtuvo fue la de un anciano que decía que en las cuevas y en los cerros había muertos y cosas antiguas, afirmación común en casi todas las poblaciones de nuestro país.
Cabe señalar que después del hallazgo, las 12 máscaras fueron extraídas de Santa Ana y hasta la fecha no han sido devueltas. Las propias autoridades de dicha comunidad desconocen su paradero, se piensa que podrían estar bajo resguardo del INAH, no obstante hasta hoy no se sabe su ubicación exacta.
Los pobladores y las autoridades de Santa Ana Teloxtoc están buscando una manera de recuperarlas, pese a ello recordaremos un caso parecido en Coxcatlán, donde se encontró una Coatlicue casi en perfectas condiciones que hasta la fecha no ha sido devuelta, pero que se encuentra espléndidamente preservada y exhibida en el Museo de Antropología e Historia de la Ciudad de México. ¿Valdría la pena traerla de vuelta, o en la Ciudad de México está mejor?
Lo cierto es que los hallazgos continúan en el Valle de Tehuacán, apenas hace unos meses se encontró un nuevo fósil de Gliptodonte, en Tehuacán el Viejo hace dos años se descubrió el templo dedicado al Diós del Inframundo Mictlantecuhtli, existe una zona de Teteles en Santo Nombre y las investigaciones en diversas zonas de nuestro valle siguen en el abandono, lo que nos hace pensar en una seria necesidad de profesionalizar los trabajos de investigación y el traer instituciones de forma permanente para explorar y restaurar los espacios que encierran una parte muy importante de la historia natural y de la antropología de México.
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Extraído de:
Las Máscaras de la cueva de Santa Ana Teloxtoc. (Vargas, E. (ed.) 1989)
Fig. 1. Máscara de madera incrustada de turquesa. De la cueva de Santa Ana Teloxtoc.
Ver en: Las Máscaras de la cueva de Santa Ana Teloxtoc. (Vargas, E. (ed.) 1989)
